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| Foto: El Universal |
En un trágico suceso, Jéssica Guadalupe fue víctima de un cruel asesinato después de dejar a su hijo en la guardería. La tranquilidad de las calles de Ecatepec, Estado de México, se vio perturbada por el sonido de dos disparos, mientras el responsable se daba a la fuga.
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Siguiendo su rutina habitual, la joven de 23 años despidió a su hijo en el preescolar de la tercera sección de la colonia Benito Juárez en la tarde del lunes.
Planeaba caminar sola de regreso a casa, pero decidió hacer una parada en un comercio cercano a la escuela preescolar. Fue en ese momento que un hombre se acercó a ella sin pronunciar palabra y le disparó.
La escena del crimen contó con múltiples testigos, entre ellos los vendedores y clientes de la tienda de helados. Atónitos, presenciaron cómo el agresor realizaba dos disparos y luego escapaba corriendo por la calle Antonio Plaza.
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Los residentes de la colonia, al reconocer a Jéssica como una vecina, se acercaron para auxiliarla y rápidamente informaron a su madre, además de solicitar ayuda a los paramédicos.
Cuando la familia llegó al lugar, los paramédicos les comunicaron que Jéssica había fallecido debido a las dos heridas de bala que recibió. Aunque los testigos brindaron información sobre el agresor, las autoridades policiales no lograron dar con su paradero.