En el marco de la campaña presidencial en Estados Unidos, surge una propuesta para utilizar bitcoin (BTC) como una herramienta para gestionar la creciente deuda del país. La idea, respaldada por el expresidente Donald Trump y la senadora Cynthia Lummis, incluye la creación de una Reserva Estratégica de Bitcoin para equilibrar el balance de pagos de la nación.
El exchange River analizó el impacto de esta propuesta, destacando que una reserva estratégica de BTC podría proteger al dólar estadounidense en caso de que su posición dominante se vea amenazada. La adopción de bitcoin como reserva podría influir en otros países desarrollados a seguir el ejemplo de Estados Unidos.
La propuesta de Lummis sugiere que el gobierno adquiera un millón de bitcoins en los próximos cinco años, lo que representaría una pequeña inversión en comparación con el presupuesto federal anual. Estados Unidos ya posee 213.246 BTC, lo que equivale al 1% de la emisión total de bitcoin.
Aunque existe la preocupación de que estos bitcoins, en su mayoría incautados, puedan ser vendidos, la propuesta aboga por mantener las reservas intactas durante al menos 20 años. Esto seguiría la estrategia de "hodl" utilizada por El Salvador bajo el liderazgo de Nayib Bukele.
El informe de River advierte que la compra masiva de BTC por parte de Estados Unidos podría aumentar significativamente la demanda y el valor del activo, generando un impacto considerable en el mercado. Sin embargo, se prevén también repercusiones regulatorias y de adopción que son difíciles de predecir.
Por otro lado, se plantea la posibilidad de que el gobierno intente ejercer un mayor control sobre bitcoin, lo que podría generar tensiones con la comunidad cripto, dado el carácter descentralizado de la moneda. Esta intervención gubernamental podría ir en contra de la filosofía original de Bitcoin, basada en la independencia y la descentralización.