El decomiso de armas y municiones de fabricación rusa en México ha aumentado un 60% en el último año, según datos de la Agencia Nacional de Aduanas (ANAM) y fiscalías estatales. Entre enero y agosto de 2024, se incautaron 14,618 armas y cartuchos rusos, en comparación con 9,123 en el mismo periodo de 2023, siendo la cifra más alta registrada hasta ahora.
Estas armas, destinadas principalmente a grupos criminales, suelen ingresar a México desde Estados Unidos, aunque también llegan por mar. Además de armas estadounidenses, se ha identificado armamento proveniente de Rusia, Rumania, Georgia y otros países. Las organizaciones delictivas, como el Cártel de Sinaloa, han extendido su alcance global, lo que les permite adquirir armas de diversas fuentes, incluso aprovechando conflictos internacionales como la guerra en Ucrania para traficar armamento.
La embajada rusa en México advirtió sobre el tráfico de armas desde Ucrania hacia Tamaulipas en 2023, destacando la presencia de armas como el lanzacohetes AT4 en manos de cárteles mexicanos. Entre los artículos decomisados, destacan cartuchos calibre .223 de la marca Tul-Ammo, pistolas Makarov y fusiles de asalto AK-47, todos de origen ruso y preferidos por el crimen organizado debido a su efectividad y bajo costo.