La producción de limón en Michoacán está bajo el control de 11 grupos delictivos, según la Estrategia de Seguridad del Gobierno federal. Estos grupos imponen el cobro de piso en seis municipios clave: Nueva Italia, Antúnez, Buenavista, Tepalcatepec, Aguililla, y Apatzingán.
Entre los líderes criminales mencionados están Miguel Ángel Gallegos Godoy ("Migueladas"), que opera en La Huacana; Juan José Farías Álvarez ("El Abuelo") en Coalcomán, y Heladio Cisneros ("La Sirena") en Buenavista. En la región de Tierra Caliente, los hermanos Gabino y Nicolás Sierra Santana, cabecillas del grupo Los Viagras, dominan Tumbiscatío. Apatzingán concentra la mayor cantidad de operadores, entre ellos José Enereo Yáñez Pacheco ("Mono Verde") y Jorge Luis Nolasco Guillén ("Cokis" o "Galleta").
Las extorsiones afectan a los productores en todas las fases de la cadena productiva, desde la cosecha hasta la comercialización. Apatzingán, con 17 mil hectáreas de cultivo y 3.2 millones de toneladas de producción anual, es uno de los focos principales. Los productores denunciaron públicamente en 2023 la creciente extorsión, con grupos como Los Viagras, Los Caballeros Templarios y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) exigiendo cuotas que han aumentado de 30 centavos a un peso por kilogramo de limón.
En respuesta a esta crisis, el gobierno ha desplegado 200 elementos de seguridad en la región de Tierra Caliente, lo que, según la alcaldesa de Apatzingán, Fanny Lyssette Arreola, ha reducido los incidentes de extorsión. Aun así, los productores continúan siendo gravemente afectados, con algunos, como el empresario José Luis Aguiñaga Escalera, asesinados por negarse a pagar.