La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) suspendió nuevamente la cotización de las acciones de Grupo Elektra, propiedad de Ricardo Salinas Pliego, debido a fluctuaciones extraordinarias en el valor de los títulos y la falta de divulgación de información relevante que explique esas variaciones. Esta suspensión ocurre solo un día después de haber reanudado la negociación, lo que busca evitar condiciones desordenadas en el mercado y proteger a los inversionistas.
Antecedentes y justificación Grupo Elektra ya había enfrentado una suspensión similar en julio de 2023 por un presunto fraude relacionado con los depositarios de sus acciones. Aunque la negociación se reabrió brevemente, la nueva inestabilidad llevó a esta segunda intervención de la BMV. La falta de información clara sobre los cambios en el valor de los títulos es una de las principales razones de la suspensión.
Conflictos internacionales de TV Azteca A este escenario se suman los problemas financieros de TV Azteca, también propiedad de Salinas Pliego. Dos firmas estadounidenses han iniciado un arbitraje internacional contra México, reclamando 219 millones de dólares por el incumplimiento en el pago de notas de deuda emitidas por TV Azteca en 2017. El incumplimiento comenzó en 2021, y aunque TV Azteca intentó frenar los procesos legales mediante una demanda de bancarrota en EE.UU. y argumentó que la pandemia de Covid-19 fue una causa de fuerza mayor, los reclamos siguen adelante bajo el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Impacto en Salinas Pliego y sus empresas La combinación de la suspensión de las acciones de Grupo Elektra y las demandas internacionales por TV Azteca agrava la situación financiera de Ricardo Salinas Pliego. Ambos casos afectan la reputación y estabilidad de sus empresas, que ahora deberán enfrentar procesos judiciales y posibles sanciones financieras, además de mejorar la transparencia en sus operaciones para recuperar la confianza del mercado.
Será crucial que Grupo Elektra y TV Azteca proporcionen claridad sobre sus movimientos financieros y trabajen para resolver los conflictos legales, tanto en México como en el extranjero, para evitar mayores daños a sus activos y a la confianza de los inversionistas.